Lo primero que hago cuando me levanto es lavarme los dientes. Es automático. No puedo hacer ninguna otra cosa antes que eso. Si no elimino el aliento a dragón octogenario que me deja la placa de bruxismo, no puedo arrancar el día.Cada cosa tiene su lugar. En el universo todo tiene un orden lógico. Por eso odio cambiar los muebles de lugar, o mezclar los Cd´s, o mover los chirimbolitos de mi escritorio, o que me agreguen mas chirimbolitos al escritorio, o que mi familia haga de mi habitación un deposito de sus cosas inservibles debido a mi ausencia (si todavía no se enteraron, sigo viviendo ahí, mamá!!!). Queda terminantemente prohibido alterar el orden en que pongo las cosas (en este aspecto me siento muy identificada con Monica, el personaje de Courtney Cox en Friends).
Me gusta dejar la carne de la salsa boloñesa para lo último. Nada más rico que acompañar ese ultimo bocado con pancito... mmmm... También me gusta comer el bonobon por capas: primero el chocolate, segundo la oblea, y por ultimo la crema de maní. Lástima que en verano se complica.
No puedo dormir destapada. Aunque haya 50º de térmica, si no me tapo aunque sea con la sábana me siento desnuda. Y ya que estamos hablando de desnudos, no puedo dormir sin pijama. Ni ropa interior, ni camisón, ni como Dios me trajo al mundo, con pijama o con pijama.
No soporto el ruido de algo metálico rozando con cualquier otra cosa. Me dan escalofríos!!!!
Prefiero prepararme yo misma el desayuno. Estoy muy acostumbrada a ello y todavía no encontré a nadie (excepto mi novio) que lo haga de la misma manera.
Y nuevamente, ya que estamos con el tema, odio que otra persona use mi taza. Siento como si estuvieran usando mi cepillo de dientes.
No soporto sacar miles de utensilios cuando cocino. Se usa, se lava.
Me relaja el olor a pasto recién cortado y pasear por la playa en silencio. Me encanta caminar por la orilla del mar sola (lastima que lo tengo tan lejos!!). Hacer manualidades también me resulta terapéutico.
Me saca completamente de las casillas ver faltas de ortografía o escuchar a la gente hablar mal.
No puedo pasar un día sin bañarme.
Cuando viajo en colectivo/auto, me gusta sentarme del lado derecho.
Me da asco tocar y el olor de la carne cruda.
Amo el olor de los zapatos y libros nuevos.
No puedo vivir sin música. Necesito escucharla aunque sea una vez al día.
No puedo tener las uñas largas, me resulta muy incómodo. Tampoco me gusta tenerlas despintadas, o con las cutículas largas, etc. Me cuido mucho las manos.
No pasa un día que no piense en inglés o lo use acriollado.
Por ahora no se me ocurre mas nada. Puf... estoy re loca!!!
